Cuando una no tiene voluntad de escribir, pero sí ganas e ideas, lo mejor es empezar con una metáfora de lo más masssista: el fútbol de la masssa.
¡Qué aburrimiento de meses sin saber qué hacer en casa!. Menos mal que el calor y los pequeños ahorros, o el "gorroneo", nos ha permitido algún que otro baño en el mar, cervecita fresca en la terraza donde nos conocen y te ponen un cuenco de "mezclaítos" que te ayudan a no cenar, y los amigos/as que encuentras porque no se han ido lejos, o se han ido sólo unos días, de "vacances".
Diversión poca, que está muy cara, pero se compensa con vivir algún que otro día la euforia de poder hablar de lo que entiendes cuando se juegan amistosos, bien sean nacionales que con extranjeros.
Ahora todo está solucionado. ¡Qué maravilla ver cómo corren todos a su casa! Los niños a cenar pronto, las mujeres a hacer la cena con prisas y los hombres, marcando pecho, despidiéndose rápido de los compañeros de trabajo y con expectativas de poder confraternizar al día siguiente durante el almuerzo, mientras hablan, ríen y discuten el partido de futbol de la noche anterior, sea Liga, Champions, o no sé qué más, dando detalles de los ángulos de pantalla plana de más de 72".
Todo porque ha llegado por fín octubre, y ¡ésto es vida!, lo otro es sólo un impas que se lleva como se puede.
Firma:
"Fufbolero traumatizado cerrado a la realidad más realizada"
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